Las personas que trabajan pero tienen la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo laboral se incrementaron en mayo, reportó el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
De acuerdo con cifras desestacionalizadas, la tasa de subocupación pasó de 6.9% de la población económicamente activa (PEA) en abril a 7.1% en mayo.
En su comparación anual, la población subocupada también se incrementó, pues en mayo de 2017 se ubicó en 6.8%.
El Inegi informó, además, que la tasa de desocupación, que se engloba a la gente que no trabajó siquiera una hora durante la semana de referencia de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), pero manifestó su disposición para hacerlo e hizo alguna actividad por obtener empleo, fue de 3.2% de la PEA a nivel nacional, cifra inferior a la del mes precedente, cuando fue de 3.4%.
En su comparación anual, la desocupación disminuyó frente a la de igual mes de 2017 (3.2% contra 3.5%).
La tasa de informalidad laboral, que incluye a la población ocupada que es laboralmente vulnerable por la naturaleza del negocio para el que trabaja y que carece de seguridad social) fue de 56.9% el mes pasado, mismo porcentaje al reportado en abril y mayor en 0.2 puntos respecto al de mayo de 2017.
Asimismo, la tasa de ocupación en el sector informal, que se refiere a los micronegocios familiares o ambulantes, representó el 27%, cifra menor a la observada en el mes precedente, cuando cerró en 27.5%. Además, registró una disminución de 0.2 puntos frente a la de mayo de 2017.
En el mes de referencia, el 59.8% de la población de 15 años y más en el país se ubicó como económicamente activa, lo que constituye la tasa de participación laboral, la cual fue superior a la del abril en 0.1 puntos y 0.6 mayor a la de mayo del año pasado.