Evidencia científica y tecnología, herramientas esenciales para la atención de la población en la emergencia sanitaria, señala estudio del IBD.
El desarrollo de soluciones innovadoras frente a la pandemia demanda el intercambio de información que provea mayores elementos para atender la crisis sanitaria.
La utilización de la tecnología constituye una herramienta indispensable para facilitar la adaptación de los servicios públicos ante los cambios que demanda el contexto.
La declaratoria de la pandemia del Covid-19 ha modificado la forma en la que los gobiernos deben emprender acciones para garantizar la atención de las necesidades de la población, señala una investigación de la Dirección General de Investigación Estratégica del Instituto Belisario Domínguez (IBD).
El estudio titulado ’Innovación gubernamental: Experiencias derivadas de la atención de la pandemia del Covid-19’, escrito por la investigadora Perla Carolina Gris Legorreta, destaca que, en un contexto de fuerte incertidumbre y presiones de tiempo y recursos, la utilización de evidencia científica constituye una herramienta de gran utilidad para robustecer la toma de decisiones.
La investigadora apunta que en algunos países del mundo se han implementado diversas acciones, tanto en materia de salud como para atender efectos asociados a la pandemia. Estas acciones incluyen ejemplos como los hackatones, la prestación de servicios públicos en línea, la utilización de la tecnología para monitorear a personas contagiadas y en situación de riesgo, la promoción de medidas de solidaridad comunitaria, entre otras.
De esta manera, en Alemania, por ejemplo, se desarrolló una plataforma para empatar las necesidades de los centros de salud con los prestadores de servicios.
En los Estados Unidos, se ha implementado un centro de transporte para garantizar la movilidad de personas con actividades esenciales durante la pandemia del Covid-19, mientras en Canadá se ha promovido el establecimiento de grupos de asistencia para comunidades vulnerables.
En Malasia, se están llevando a cabo juicios vía videoconferencia; en Australia se modificó la regulación para facilitar la entrega de kits de diagnóstico, otra iniciativa destacada se observa en los Países Bajos donde se proveen apoyos a pequeños y medianos agricultores afectados por la crisis.
México, por su parte, con la creación del personaje ’Susana Distancia’ ha diseñado un instrumento efectivo de comunicación de las medidas de distanciamiento social que puede favorecer, además, la disminución de la ansiedad infantil por la crisis y el confinamiento.
El estudio del IBD se puede consultar en la siguiente dirección: http://bibliodigitalibd.senado.gob.mx/handle/123456789/4865
